domingo, 25 de mayo de 2008

Problemas de física, sin resolver.


Yo pensaba que los problemas empezaban
algo así como,
dos trenes que salen al mismo tiempo,
así era en la escuela,
de puntos separados miríadas de kilometros,
y todo iba lento, y la distancia
no importaba.
El primero a 80km/h, el segundo
a un tercio de la velocidad del primero,
¿cuanto tiempo después? ¿dónde?
y ningún, ¿por qué?,
ambos trenes se cruzaron,
y ambos, tú y yo,
éramos los maquinistas.

Me faltan datos para aplicar Newton,
porque la segunda ley universal
se desploma como la manzana,
al ver tus ojos.

Sólo recuerdo que miré durante horas hacia atrás.

"Dinámica de los cuerpos en movimiento",
tema siete, física de primero de carrera,
tu saliste a la pizarra, yo
no entendí la lección,
atendí a tu cuerpo.

Estoy harto de dormirme en clase.

Sueño despertar con alguien
que me mienta cada mañana,
susurrandome
al oido,
mordisqueándome
un te quiero,
y que no desaparezca luego,
envuelta en el humo de una locomotora
que se aleja, y me muerde la oreja
con su insoportable ruido.

1 comentario:

Pimienta dijo...

Así parece ser.

Yo duermo con un príncipe,
todas las noches está en mi cama,
no falla ninguna.
Espera atento,
que llegue la noche para compartir calor entre las sábanas,
para que le abrace,
y nunca se queja si le aprieto demasiado;
y unos ojos enormes,
abiertos cuando duermo,
que velan mis sueños.
Y esos días que doy mil vueltas en la cama,
porque no recuerdo cuál era la postura en la que abandono este mundo por unas horas,
y me toca pensar,
y revolver la manta,
y la sábana hecha un burruño en los pies del colchón,
y el pijama retorcido.
Pero él siempre esta ahí,
mirándome sin decir nada,
son sus ojos enormes,
y sin negarme nunca un abrazo,
le puedo contar mil cosas, q me escucha,
sin decir nada,
porque no le toca.
Está ahí cuando me despieto,
y cuando me acuesto,
cada mañana y cada noche.
Y es mi peluche,
mi peluche rana,
mi príncipe rana.