martes, 2 de octubre de 2007

Fíate del Oráculo... y no corras.


Cuando hablamos de Kavafis ( Κωνσταντίνος Πέτρου Καβάφης ), hablamos del griego moderno en la palabra, y de la cultura clásica sobre el papel. Hablamos de un icono de la cultura gay de su tiempo capaz de ocultar entre lineas interesantes ideas. Conocí a Kavafis desde pequeño, pero no como escritor, para mí durante mucho tiempo fue sólo un bar de Astorga dónde tomaba café los fines de semana. Luego se despertó mi interés por la poesía y Kavafis ha ocupado parte de mis lecturas. Del bar, de las conversaciones en él, conocí a Bukowski, a los Panero hijos, Leopoldo María y Juan Luis, astorganos que aunque pongo juntos, no podrían estar más distanciados; surgió Allen Ginsberg y con él se desveló el universo Beat de Jack Kerouac, de William Burroughs y de tantos otros. Pero de esto hablaremos otro día, hoy nos quedamos con la poesía sensible, con el renacimiento de la lengua griega clásica de manos de Kavafis, y con la magia de un trilero que no oculta las palabras, pero las dota de un significado ambigüo, como lo hace el Oráculo, como la misma metáfora de la vida o la insipidez de la nada, como un atardecer en Acaya...


EL PLAZO DE NERÓN


No se inquietó Nerón cuando escuchó
El vaticinio del Oráculo de Delfos.
"Los setenta y tres años que tema".
Tenía tiempo aún para gozar.
Tiene treinta años. Muy suficiente
es el plazo que el dios le da
para preocuparse de los peligros futuros.
Ahora va a regresar a Roma un poco cansado,
pero cansado exquisitamente por este viaje,
que fue todo días de placer
-en los teatros, en los jardines, en los giimnasios...
Atardeceres de las ciudades de Acaya...
Ah la voluptuosidad de los cuerpos desnudos sobre todo...
Esto con Nerón. Y en España Galba
secretamente su ejército reúne y lo ejercita,
el anciano de setenta y tres años.

2 comentarios:

Pimienta dijo...

Bukowski me lo enseñó un profesor de literatura en segundo de carrera. Para muchos es un vulgar y escandaloso, pero creo q dice las cosas como las siente y como son, pondré algún texto algún día, por qué no? me trajo recuerdos.

Hoy no sé dónde estoy niño, me perdí... y esta vez sin quererlo.


Espero haberme perdido y no estar perdida.




Toma, un beso, lo encontré por acá, entre todas mis cosas perdidas.

Ander dijo...

Bueno, ya sabes, son ciertos escritores que escriben de una manera tan peculiar que casi les hace únicos. A mi me gusta, asiq tu puedes poner lo que quieras Pi. Ya sabes que no hay nada mejor que sacar la brujula de los deseos cuando estes perdida, lo de escupir al alto ya no se lleva.
un besazo.